CASTELLÓN. ÚLTIMA DE LA MAGDALENA: VICTORINOS, VARIEDAD, CASTA Y EMOCIÓN

José Luis Moreno corneado por el toro de Victorino Martín

Última de La Magdalena en Castellón.

Victorinos: Variedad, casta y emoción

Por José Antonio del Moral

Diario La Gaceta / Intereconomía

Lunes 15/03/2010

La bien presentada corrida del célebre ganadero, entipada, movidísima y con dos toros excelentes, nos devolvió a lo que tanto ha faltado en la feria respecto al ganado, prestando importancia a lo que hicieron los toreros. Por la grave cogida que sufrió José Luís Moreno tras pinchar una buena faena de muleta al más noble primero, la jornada se convirtió en un mano a mano accidental entre Rafaelillo y Luís Bolívar del que salió triunfante el murciano al cortar una oreja del sexto toro, el más completo del envío. Con menos suerte, el colombiano Luís Bolívar dio una vuelta al ruedo tras fallar con la espada en el tercero, el más manejable de los dos que mató, y terminó desbordado por el muy difícil quinto que casi se lo echan al corral.

Castellón de la Plana. Plaza del Paseo Ribalta.

14 de marzo de 2010. Octava y última de feria. Tarde soleada y fresca con más de media entrada.

Seis toros de Victorino Martín, bien presentados en el tipo de la casa y parejos. Todos sacaron movilidad y mucha casta. Por más nobles, destacaron el primero y el sexto. También noble pero rajado el segundo. Corto, probón, mirón y con genio el tercero. En alimaña el cuarto. Y equívoco por desarrollar peligro el en principio manejable quinto.

José Luís Moreno (encarnado y oro): Pinchazo del que salió cogido y herido gravemente de cornada en la cara posterior del muslo izquierdo con trayectoria ascendente de 25 centímetros y desgarros musculares.

Rafaelillo (marino y oro): En sustitución del herido, mató al primero de dos pinchazos y estocada, gran ovación a Moreno que recogió uno de sus peones desde el tercio. Dos pinchazos y estocada, vuelta. Ladeada casi entera a la trágala, ovación. Estoconazo, oreja y fuerte petición de otra.

Luís Bolívar (corinto y oro): Estocada baja, petición y vuelta al ruedo. Dos pinchazos, estocada baja y quince descabellos, dos avisos y silencio. Un gran puyazo al sexto toro de Juan José Esquivel. Muy bien en la brega del segundo toro Pedro Mora. Y en palos Domingo Navarro al parear al quinto.

Muy entretenida y, sobre todo, muy emocionante resultó la siempre esperada corrida de Victorino Martín. Acaparó el protagonismo de la tarde a pesar de lo muy bien que aprovechó José Luís Moreno al primer toro, uno de los dos mejores, que desgraciadamente le hirió de gravedad. Una pena porque tenía ganada una oreja de ley de haberlo matado bien y a la primera.

Con la profesionalidad de que viene haciendo gala Rafaelillo, que tuvo que matar cuatro toros por el percance del primer espada, salvó sobradamente la papeleta tanto con el manejable segundo toro del que no cortó oreja por pinchar tras una faena de más a menos por cuanto fue rajándose el toro a medida que fue avanzando el trasteo, como del complicadísimo cuarto al que pasaportó con gran habilidad pese al peligro que tuvo. Su gran oportunidad le llegó con el mejor de la corrida, el bravo y encastadísimo sexto frente al que anduvo entregado e incansable en un sinfín de muletazos sobre ambas manos, en demasía acelerado. La faena tuvo más emoción que reposo y calidad. Pero como mató de una espectacular y eficacísima estocada, el público pidió con mucha fuerza las dos orejas del bravo animal. La presidencia puso orden y solo dio la que, sin duda, había merecido.

Con bastante menos suerte, Luís Bolívar salió mal parado. Sobremanera con el muy difícil quinto que le desbordó y a poco se lo devuelven a los corrales tras hartarnos con el descabello.

José Luis Moreno lancea al "victorino"