sábado, 11 de septiembre de 2010

VILLASECA DE LA SAGRA: PREGÓN DE FERIA / Por Juan Lamarca

Fotografía Dolores de Lara

VILLASECA DE LA SAGRA

FERIA Y FIESTAS DE LA VIRGEN DE LAS ANGUSTIAS

10 DE SEPTIEMBRE DE 2010

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PREGÓN DE JUAN LAMARCA

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Pueblo de Villaseca, aficionados taurinos, excelentísimo ayuntamiento, toreros, ganaderos, queridos amigos todos…..

Ya metidos de lleno en estas fiestas de Villaseca en honor a su patrona la Virgen de las Angustias, recordemos el tributo que el toro se ha cobrado con la vida de Jesús Ángel, ese hombre bueno y valiente, paisano de Mocejón que vino a este pueblo a disfrutar de su afición corriendo sus famosos encierros. Que su sangre sea semilla fértil que germine en los profundos campos de la fiesta.

Villasecanos, abramos el portón a la alegría de vivir y compartir lo que es nuestro, la Fiesta Brava.

En un pueblo como Villaseca donde sus bizarras y laboriosas gentes, hombre y mujeres, sienten y dan rienda suelta, después de un año de duro trabajo, a su pasión, a su legítimo orgullo taurino, en los famosos encierros y novilladas.

Un pueblo con el hierro de la Sagra, que imprime a sus vecinos el carácter propio de la seriedad y la tradición de la comarca de la Sagra toledana.

Gentes forjadas sobre oleaje de espigas, entre la dureza de un campo agreste, y la blanca y arcillosa tierra ladrillera y alfarera.

Un pueblo donde el pan es pan, el vino es vino…y el toro es toro. Y es el toro, precisamente, el que viene marcando desde tiempos inmemoriales las fiestas de Villaseca, y dónde la historia acredita que, ya tres siglos atrás, un ganadero llamado Carlos III vendía toros de su Real Vacada a esta localidad para celebrar corridas con nobles a caballo en las que también intervienen villanos a pie como los toledanos Miguel de la Canal y José Rodríguez de Mora, pioneros de esa legión de toreros que ha dado la tierra de Toledo para gloria del toreo.

Pero fueron los encierros de reses bravas los que siempre adquirieron mayor protagonismo entre los festejos populares de Villaseca y los que aglutinan a mayor número de corredores de la taurina comarca de la Sagra.

Es en los últimos años cuando el auge alcanzado hace brillar en todo su esplendor esta tradición centenaria de Villaseca, gracias a la ingente labor de la Corporación Municipal que ha sabido canalizar los anhelos de su pueblo por las fiestas con toros, conjugándola con la feria de novilladas donde se disputa el trofeo El Alfarero de Oro, y con la celebración de sus prestigiosas Jornadas Taurinas para la divulgación y fomento de la cultura taurómaca, por las que desfilan toda clase de personajes y personalidades del planeta de los toros, para disfrute y orgullo de los vecinos y aficionados de Villaseca y su comarca.

La tradición y afición taurina de Villaseca es la misma que se siente en la comarca de la Sagra y en su provincia de Toledo. Tierras ganaderas donde pastan los toros bravos barbeando lindes de pueblos y villas, desde la colmenera y canterana de Urda, junto a la vecina y serrana de los Yébenes, pasando por los términos de Calera y Alberche del Caudillo, y los rurales predios del Casar, Cuerva, Yunclillos, Oropesa, Alcaudete, Las Herencias, Buenaventura, pasando los campos de Sotillo de las Palomas, Navarcuende, Ventas de San Julián, Las Ventas con Peña Aguilera, San Pablo de los Montes, y hasta las riberas de los amigos de Añover de Tajo.

Donde los encastes “Núñez”, “Domecq” y “Atanasio” se recrean en las reatas de los hierros como los de los Hermanos Lozano, del “Ventorrillo, “Cortijoliva”, “Conde de Mayalde”, Fernando Peña, y el del “Tajo y la Reina”, de José Miguel Arroyo “Joselito” en las dehesas de la histórica y monumental Talavera.

Es la comarca de la Sagra y en su pueblo de la Alameda donde emerge un tronco fundamental para la existencia de la tauromaquia. De ese tronco con el nombre de Lozano brota una de las dinastías capitales para el mundo del toro, la de los hermanos Lozano, Manolo, Pablo, Eduardo, y José Luís, santo y seña en la empresa taurina, ganaderos de excepción, y toreros preeminentes, en la gran estirpe conformada por varias generaciones…y las que vengan.

De casta le viene al galgo, y aquí en Villaseca buena muestra hay de ello en el cuadro del Milagro de la Ermita de la Ntra. Sra. de la Salud. Es la imagen de un antepasado de los Lozano, Manolo Martin, agarrado al fajín de la Virgen, que refleja el milagro de su salvación después de recibir veinte cornadas en la plaza de Villaseca de la Sagra.

¡Sí señores! Los Lozano, orgullo toledano como también lo es la pléyade de toreros que jalonan la historia de esta tierra sin par.

Las gentes de Villaseca, como buenos toledanos que son, presumen viendo como los nombres de Borox, Quismondo, Santa Olalla, o Mora, quedar grabados con letras de oro en el libro de la historia toledana gracias a ilustres hijos como Domingo Ortega, Gregorio Sánchez, Niño de la Taurina, y Eugenio de Mora.

Además, la comarca de la Sagra cuenta con el empaque de haber adoptado en el pueblo de la Alameda al más grande, como canta su pasodoble, a ¡ Marcial Lalanda!.

Allí vivió, allí mató su primer becerro y su último toro. Y entre medias, un mandón del toreo, célebre apoderado, y ganadero de postín.

¡Villasecanos! fecunda para la Fiesta es vuestra tierra. Se dice y se escribe que Domingo Ortega surgió de la nada, pues no señor; Domingo Ortega surge de la tierra de Borox, con el carácter de sus gentes, forjado en la rudeza de su campo, con decisión firme se ser lo que día a día soñaba pastoreando reses bravas. Eso lo da la tierra y lo transmite la estirpe toledana, es lo que hace un humilde cateto conquiste en poco tiempo el trono del toreo para ser uno de los grandes de su historia.

Es un sueño que se inicia en Septiembre de 1930, cuando ese joven desconocido saltó a los lomos de un burro para trasladarse de Borox a Aranjuez y vestirse de torero para actuar de sobresaliente en un mano a mano entre Manolo Bienvenida y Marcial Lalanda. Manolo le cedió un quite a Domingo Ortega en el último toro. Sólo fueron cinco lances por un lado y por el otro, rematados con media verónica,…… y acabó con el cuadro.

Solo unos meses después, en Abril del año siguiente se repite el mismo cartel, pero ya Domingo de matador, cobrando el doble que sus compañeros, y acaba la temporada a la cabeza del escalafón con 93 corridas toreadas. ¡Un caso extraordinario! La Fábula de Domingo Ortega como titulara Díaz Cañabate.

El pueblo de Quismondo, no solo será recordado por la saga de sus famosos picadores. Este otro enclave de la Sagra constituye un hito por ser la cuna de una de las Dinastías señeras de la tauromaquia, la de Dominguín.

Fue Domingo González Mateos el que también se echara al monte con la firmeza y resolución de un valeroso toledano para ser torero y llegar a la alternativa, y Joselito El Gallo se la dio. Otra aventura toledana cumplida que no es más que la forja de un personaje decisivo para el toreo, empresario pionero, creador de la figura del apoderado moderno, y artífice de su propia dinastía como padre de Pepe, Domingo, y Luis Miguel Dominguín.

Siempre la fiesta ha contado con la generosidad de Toledo, de sus gentes y sus hijos que soñaron con militar en ella. Fruto de ello es el matador de toros de Gregorio Sánchez, el de Santa Olalla, la antigua visigótica Santa Eulalia de Mérida. Aquel torero continuador de la escuela de Domingo Ortega, sobrio y elegante, valiente y dominador, con marcado aroma de pundonor y vergüenza torera. El toledano Gregorio sigue hace historia dirigiendo la Escuela de Tauromaquia de Madrid, forjando nuevos toreros.

Encomiable fue la trayectoria de otro famoso de Santa Olalla, Carlos Collado “Niño de la Taurina”, con su toreo recio y poderoso que paseó el nombre de su pueblo por todo el orbe taurino. Inolvidable su apoderado el gran Manolo Cano, inolvidable su gesta y triunfo en las Ventas toreando en solitario en su despedida de novillero.

Su alternativa por el maestro Antoñete, quedó en los anales de la historia de la plaza de Toledo, sus paseíllos en San Isidro fueron el fiel reclamo de sus paisanos, y sus campañas americanas aún se recuerdan por entre los volcanes andinos.

Toledo sigue presente en primera fila y ahí tenemos a Eugenio de Mora llevando el apellido de su tierra. Eugenio y su impacto en la taurina Toledo cuando con solo veintitrés años consiguió salir por la Puerta Grande de Las Ventas, y que sigue enarbolando con honor el estandarte torero de su estirpe toledana.

Interminable es el romance de la gentes de la Sagra con el toro, inquebrantable es el amor de esta noble parte de Castilla con la Fiesta.

¡Oh Toledo ciudad imperial!

¡Toledo tierra de toros!

¡Toledo el de la épica del Alcázar!

¡Toledo tierra de héroes!

Sí, gentes de Villaseca, porque héroes son sus toreros, porque héroes anónimos son sus gentes en la abnegación histórica del quehacer diario, en el duro trabajo con su bizarra honradez. Y porque héroes fueron los que ofrecieron su vida por una España mejor.

¡Toledo tierra del Corpus!

“Los Jueves tres en al año hay

Que brilla más brillante que propio rayo de sol

Jueves Santo, Corpus Christi,

Y el Día del Señor de la Ascensión”

Es ahora, en estos difíciles tiempos de persecución de valores tradicionales, taurinos, y patrióticos, cuando Villaseca de la Sagra más brilla por su vocación española.

En estos momentos lamentables cuando regiones de España reniegan de sus valores y de su identidad, cuando se maniobra y se legisla en contra de una cosa tan nuestra….tan obligada por la naturaleza y por la historia como es la Fiesta Nacional, son estas fiestas de Villaseca las que se erigen como un bastión en defensa de la Fiesta Nacional, con su alcalde Jesús Hijosa al frente de la Corporación Municipal.

Por ello nos debemos felicitar, mostrarles gratitud, y unirnos a esta lucha.

El prestigio de la Fiesta y su cultura se defienden por sí solos, pero su pervivencia peligra y las corridas de toros son el objetivo de los bárbaros.

El toro nos exige protección y es la hora del banderín de enganche para dársela. Tenemos que sumar esfuerzos no solo en la defensa de la Fiesta sino en la beligerancia contra aquellos que la persiguen.

Hay que combatir en todos los frentes y desconfiar de todos los que la atacan. No debemos consentir que propias instituciones públicas españolas, y que determinadas actuaciones políticas obren en contra del propio ser y sentir de los españoles.

¡Villasecanos, felices fiestas!

Desde el corazón de España, desde La Sagra, con devoción a la patrona la Virgen de la Angustias, proclamemos con alegría aquello que nos une:

¡Viva la Fiesta Brava!

¡Viva Villaseca!

¡Viva España!

-Villaseca de la Sagra, a 10 de Septiembre de 2010-

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