HAY UN CAMINO A LA DERECHA

 

LO INSÓLITO COTIDIANO

Por ANTONIO D. OLANO / Fotografías: ©DOLORES DE LARA 

¡Qué noches las de aquellos días! Precisamente en los días en que Joe Frazie, un mito boxístico que hizo morder la lona a Muhammad Ali perdía la vida, fue puesto K. O. por una  enfermedad.

Entre las doce cuerdas un “paquete” política y humanamente descalificado, que subía al “ring” calzando los guantes de siete onzas hechos de mentiras. Y exhibiendo una pancarta que rezaba así: “Pelea por lo que quieres” . Una clara invitación a que los jueces de la pela se inclinasen por lo que de verdad quieren: que de momento no vuelvan los que, durante su mandatura de varios años, mandaron a los españoles.

Rubalcaba que nunca debió cruzar guantes con el otro candidato que, pienso, debe ocupar  la presidencia de este país. No digo reino, sin añadir de taifas, con lo que está cayendo. Se desgranan incluso las joyas de la Corona como el príncipe de un cuento ilustrado por Armani, el apuesto Urdangarín que, presuntamente, dicen, se quedó con el cepillo y limosna. Eso aún está por ver. Y después Pepiño  Blanco, veremos por donde sale, que va a salir, si al juez no se le olvida.

“Segundos fuera”. Comienza el segundo asalto y los segundos de Rubalcaba, pienso yo. Le advierten que debe arrojar la toalla, porque  el ciclista Rajoy lo ha dejado ya casi cao y eso que no iniciaron la escalada al Tourmalet.

Mariano, cuando vaya a la Moncloa le acompañarán millares de ciclistas, como millares de gaiteros lo hicieron con Fraga a la sede de la Xunta.

Rajoy, espléndido y rotundo con calma y sin pausa, ganó la carrera antes de llegar al Arco de Triunfo, como le sucedió a Contador en París a Martín Bahamontes. Rubalcaba, pienso que será el nuevo dirigente del naufragio griego.

España necesita un cambio, como todo en esta vida, de esta forma nos desengañaremos con nuestros propios ojos. Que España con este cambio no va bien, pues nuevamente se volverá hacer el canje y todos tan contentos.

Un gran director cinematográfico español, Rovira Veleta, realizó una magistral película titulada “Hay un camino a la derecha”. Mariano Rajoy, ahora si que se ha aprendido el oficio de líder carismático, debe utilizar el titulo para ayudar a España a salir de la crisis a la que está sometida.

Rajoy, vestido con el “maillot” amarillo, rosa o rojo, depende del país en el que se dispute la “vuelta” ya tenía ganado, con creces, su llegada a la dirección de España. A desalojar de nuevo la Moncloa. Hay que dejar el paso franco a una nueva revelación y quizás salvación de España.

Volverá a los cielos del Aubisque “el águila de Toledo”. Me refiero, Rajoy lo sabe, a Federico Martín Bahamontes, español hasta los pedales de su “burra”.

Ha llegado, para subir y coronar montes y velocidades, la hora de los manillares y los pedales.

Los socialistas gobernantes tendrán que conformarse e incluso ayudar al nuevo gobierno. 

Al otro ciclista gallego, y pontevedrés como Rajoy, lo animábamos los chiquillos cuando aparecía, líder de la Vuelta a España, en la carretera de mi Villalba natal, gritándole:”¡Animo, Delio, que la ganas!

¡Animo Mariano porque pensamos que la has ganado! ¡Todo sea por el bien de España!