LAS VENTAS: ABELLÁN BAILANDO CON LA MUERTE

 PROPIAMENTE PARECE COMO SI TORO Y TORERO

SE DISPUSIERAN A BAILAR UN PASODOBLE

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Miguel Abellán nos demostró

que aparte de bailar

también sabe jugarse la vida

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TEXTO Y FOTOGRAFÍAS: © DOLORES DE LARA

Ayer Miguel Abellán dejó bien patentado que el torear es jugarse la vida, es jugar con la muerte. También él quiso ser profeta en su tierra y demostrar que también tiene agallas y profesionalidad. ¡Y vaya si lo demostró!

Un portagayola que será recordado

Al sonar de tambores y clarines se encamina, pausadamente a recibir al toro, a encontrarse con la muerte si fuera necesario, se postró de rodillas como un penitente. En un abrir y cerrar de ojos, por el portón de toriles, aparece Carpetón, un señor toro entradito en carnes y de muy buen ver: 553 kg., con unos cuernos que asustan, que no dejan indiferente a nadie, Abellán lo recibe a Portagayola, una vez, dos y hasta tres pases seguidos le dió sin inmutarse, rodillas sobre la arena. El numeroso público y muy respetable que casi abarrotaba la plaza no daba crédito a sus ojos, ojos, que mayoritariamente mujeres se tapaban con las manos, no queriendo volver a presenciar lo que en fechas recientes habían vivido con David Mora.

Su traje de primera comunión se convirtió en túnica sangrienta 

Hasta llegar a la enfermería fue saludando al público asistente sin desfallecer

Abellán nos demostró con el capote su veteranía, su buen hacer. Y llegados al tercio de muleta, dando muestras de buen toreo, se produce la tragedia, la cogida. Mal parado, después de ser pisoteado y zarandeado por el animal, con el traje,  la cara y todo él cubierto de sangre, se levanta medio aturdido, se prepara y entra a matar. Como puede termina la faena, el torerazo que en este su primer toro se lo había dedicado al público, es despedido entre cariñosos y fuertes aplausos, va camino de la enfermería, para reaparecer “recuperado”, nuevamente al redondel de la plaza para terminar su lote de la tarde donde le es concedida al final de la faena una oreja.

VALIENTES Y MUY TOREROS, ¡SI SEÑOR!

 

Abellán es cariñosamente recibido por el alguacilillo al entregarle la oreja

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Joselito Adame, Paco Ureña, Abellán, los tres toreros estuvieron valientes y a la altura de querer aprovechar al máximo toros con casta brava.

Joselito Adame sin miedo delante de las astas del toro

 

Paco Ureña luchando titánicamente con el astado

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FICHA DEL FESTEJO.- Toros de El Montecillo, Encastados, bien presentados, rápidos de movilidad, muy complicados.

Miguel Abellán: estocada atravesada, pinchazo, estocada y cuatro descabellos y estocada alta (oreja tras aviso).

Paco Ureña: estocada baja (silencio); y estocada baja 

Joselito Adame: dos pinchazos (silencio);  media, (palmas,tras aviso y viva méxico ).

LA GENTE EMOCIONADA SALÍA COMENTANDO LO VIVIDO

Taurinos posando con agrado a la cámara