Ángel Manuel García con los bandoleros de las Cuevas de Luis Candelas, su director Antonio Pino y el encargado Elías Llorente.
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TEXTO Y FOTOGRAFÍAS: DOLORES DE LARA
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Ayer, dieciséis de enero del dos mil diecisiete, se cumplió 10 años de la celebración en Las Cuevas de Luis Candelas las Bodas de Plata de la Fundación Villa y Corte de Madrid que preside Ángel Manuel García. Y también 35 años desde su fundación.
En este día se ha querido recordar la figura del insigne Catedrático de Historia del Arte, Académico de las Reales Academias de Bellas Artes y de la Historia, Vicerrector de la Universidad Complutense, Presidente del Instituto de Estudios Madrileños... Francisco Portela Sandoval. Su hijo, Francisco Portela Oviedo, también historiador -como no podía ser de otra manera- y conductor de dos emisoras digitales en Radio Cope estuvo entre los presentes.
Las Cuevas de Luis Candelas, hoy restaurante, sito como todos ya conocemos -y el que no lo supiera ya lo sabe- en el Arco de Cuchilleros de la madrileña Plaza Mayor acogió, cobijó y dio de comer a una pequeña pero no por ello menos importante representación de integrantes de la Asociación de "Amigos de Julio Camba", actuando como maestro de ceremonias el hombre más querido y conocido de la céntrica calle de La Sal, su relojero, mi buen amigo Ángel Manuel García, que en breve plazo se pondrá en manos del cirujano de turno para que lo repare y sane -como sus mundialmente conocidos relojes- de sus dolencias. Le deseamos de todo corazón su rápido restablecimiento.
Foto de familia: Ángel Manuel arropado por las hermanas Pilar y Chila García Calderón, victoria Bandrés, Santiago Izco, Victoria González, María Grande, Amparo Chacón, Juan Campos, Francisco Portela Oviedo y la directora de LaMontera.net, Dolores de Lara.
La tertulia-cena que en un principio se iba a celebrar como viene siendo habitual en el Restaurante Ciriaco; en esta ocasión, no por motivos de seguridad sino por imperativo legal y de necesidad: unas inoportunas obras, se ha trasladado como ya he dicho a Las Cuevas de Luis Candelas, el bandolero más conocido de todo Madrid, que robaba a los ricos para dárselo a los pobres -arduo trabajo tendría hoy en día-.
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